After Sleeping

The pillow was still warm and moisty.

She was afraid of leaving me alone in her room.

His duvet got wrapped around my legs when I got in the bed.

There was some hair on the bed covers.

Her sheets felt like silk on my naked feet.

I could smell her perfume on the clean pillow.

The bed was chilly and unwelcoming.

The way into the room was challenging.

His room smelled like cigarrette smoke.

The cold breeze was coming in from the window.

Algo pasó en la cama antes de que se tomara la foto. Alguien dormía allí, pero ¿quién?

La vida de mis vecinos me produce cierto deseo. Podrían llamarme voyeurista. Mi curiosidad quiere ver dónde viven y cómo son, quiero formar parte de su intimidad.

Interferir en el espacio más personal de mis desconocidos: sus camas. Inmiscuirme con mi presencia al estar en su habitación y tocar sus pertenencias. Dejar rastros de mi presencia y manchar su habitación. Entrometiéndome con mi cámara como fotógrafa observando y escudriñando; apoderándome de sus camas después de que durmieran en ellas. Registrando su intimidad y las marcas de mi irrupción en sus camas.

La serie cuestiona el poder de la cámara en su afán por romper las barreras de la intimidad e invadir espacios personales; pero también la cámara como obstáculo en la formación de una relación entre fotógrafo y fotografiado. ¿Tiene el fotógrafo la capacidad de ser todos: el voyeur, el invasor, la mirada?

En After sleeping, el papel de fotógrafa me permite acercarme a estas personas y pedirles que me dejen entrar en su casa y en sus camas. Al documentarlo, satisfago mi voyeurismo y mi afán de curiosear. De un modo extraño, estas imágenes se convierten en mi trofeo personal; pero sólo hasta que un nuevo deseo de mirar se apodera de mí.